Plataforma Nacional

2º Reflexión

No podemos seguir hablando y lamentando en las condiciones que trabajamos, pero a la vez no contribuyendo a que eso se remedie desde una Organización echa y dirigida por los dolientes, osea por nosotros los transportistas de verdad.

Nosotros somos los que exponemos y arriesgamos todo lo que tenemos para desarrollar nuestra labor, y que en cambio sean los que no arriesgan nada los que manden en un sector que sin nuestros camiones desaparecerían.

PLATAFORMA se encuentra reactivada y preparada a nivel administrativo para que todos formemos parte de ella.

Por la experiencia que se tuvo, tenemos que marcarnos unos objetivos que nos den una base sólida y vertebrada a nivel Nacional para que este proyecto no pueda ser derribado y sus componentes acosados como así pasó en el año 2008.

Las Pymes y autónomos somos el 85%  de las empresas que componen el sector del transporte por carretera, el 15% restante son los grandes flotistas y cargadores que son los que forman el comité Nacional de Transportes.

Por nuestra desorganización ese 15% maneja al otro 85%, en cualquier sistema un poco abierto de mente nos dirían que nuestra inteligencia brilla por su ausencia, y sin ánimo de ofender a nadie, pero tenemos que reconocer que es imperdonable que consintamos ese desnivel que a su vez nos somete a todo tipo de imposiciones que hacen que hayamos llegado a un punto donde nuestra pasión por este oficio a desaparecido.

Eso no quiere decir que no podamos “darle la vuelta a la tortilla”  y ordenar de una vez por todas de manera justa la posición real que tenemos cada uno en este sector.

Todos somos necesarios y nos necesitamos entre nosotros (Transportistas pequeños, grandes y cargadores) pero para que la convivencia sea posible y fructífera cada uno tiene que respetar al otro, cosa que desde hace mucho tiempo dejó de pasar.

No podemos seguir solos y desamparados cada uno por nuestro lado, los medianos y pequeños transportistas tenemos de una vez que poner la voluntad de proteger al vecino para ser protegido uno mismo.

Sabemos que solos somos vulnerables y lo que sí tenemos seguro es nuestra garantía al fracaso y acoso diario por todos. Seamos un poco inteligentes y contribuyamos a intentar ver el futuro de manera colectiva, ya que es el único camino que puede hacer que cambie nuestra situación a mejor en todos los sentidos.